Ahora menos que nunca le contradigo en
aquello de: “Yo soy una maestra que canta”, porque, además, lo fue.
Pero más que eso, mucho más que educadora y
cantante y sabionda y humana, Teresita fue la autora e intérprete como nadie
(ni siquiera su queridísima Liuba) de Mi
gatico Vinagrito, de Dame la mano y
danzaremos, de Lo feo y Vicaria…
Gracias a Dios tuvimos y tenemos una Teresita
Fernández.
Y repito: fue, y es, una Trovadora.
No tengo la menor duda,…porque tenemos el corazón feliz.